La vida es un continuo trabajo: te despiertas y cada nuevo día te trae lo mismo de siempre, igual pero distinto... esa diferencia que te aporta es lo que hace que tu vida sea maravillosamente diferente.

martes, 5 de junio de 2012

No te odio pero no quiero verte

Hay personas de las que no debería hablarse nunca, yo por mi no hablaría de ellas, me hace daño, pero claro, la vida te pone delante personas que les nombran. No me refiero a no hablar de quienes se han ido y volveremos a ver, algún día y si nos portamos bien, en el Cielo; me refiero a esas personas que casualmente nos hicieron felices un tiempo (años, meses u horas) y ahora cada vez que oímos sus nombres o sabemos algo de ellas queremos escapar corriendo. Los primeros... claro que hay que hablar de ellos, yo al menos prefiero nombrarlos cuando les recuerdo o me gusta ver sus fotos y letras y mirar al infinito y hacer como si les diese las gracias por haber estado a mi lado. Los segundos... quizá no volvamos a verlos, pero viviendo en la misma ciudad o país, teniendo amigos o conocidos en común... es difícil no volver a saber de ellos, y eso apesta.
Ojalá se hubiese vuelto a su ciudad, ojalá alargue el erasmus o se enamore en las vacaciones y se quede al lado del mar, pero por favor, que no se pasee por Madrid ni Coruña, que no visite los bares en los que me dan de beber ni se cruce con mis amigos. No quiero volver a escuchar que te han visto, que estabas impresionante y parecías feliz. No quiero ir andando por la calle y sufrir un amago de ataque al corazón por creer que eres tú el que está dentro del coche que espera paciente a que el semáforo cambie a verde su color. No quiero que me digan que les hizo gracia el chiste que les contaste ni que se inventen que preguntaste por mi para hacer como que te importo algo. Simplemente me gustaría que le tocase la lotería y se comprase una casa en Miami, pero por favor que no suba las fotos al facebook.

(((maca)))

No hay comentarios:

Publicar un comentario